Podemos definir como rotación el conjunto de movimientos de los jugadores intercambiando posiciones unos con otros.
Estos “movimientos” como definimos son extremadamente tácticos y parte integral del juego en espacios reducidos, sea el baby o el fútbol sala, saber usarlos y para qué usarlos puede dar una ventaja considerable en los partidos.
¿Pero, cuales son los objetivos de estos movimientos?
- Mantener una organización táctica del equipo sin desequilibrar las líneas.
- Abrir huecos en la defensa rival, provocando la desorientación defensiva y ocupando el espacio libre generado para poder realizar una finalización.
¿Qué es la rotación?
- Una rotación es una forma ofensiva de moverse.
- El intercambio de posiciones obliga al movimiento continuo tanto de los jugadores atacantes como de los jugadores defensores.
- El equipo que realiza la rotación pretende sacar provecho de ese movimiento, generando espacios libres.
¿Qué debemos tener en cuenta?
- La rotación es una acción que requiere un desgaste físico importante por tanto hay que estar preparados físicamente para ello.
- Para una buena rotación, debe existir coordinación de movimientos entre los jugadores. Éstos tienen que estar preparados para realizar movimientos acordes a los de sus compañeros y saber aprovechar las diferentes situaciones de ventajas que se pueden generar en el transcurso de la rotación.
Estas situaciones de ventaja suelen aparecer de diferentes formas, por eso los jugadores tienen que estar alerta para poder realizar la acción de finalización en el momento oportuno.
Cuando un equipo tiene paciencia y realiza las rotaciones correctamente, tendrá su oportunidad para atacar de forma ventajosa. Pero para ello, todos los jugadores tienen que tener claro que hay que insistir en los movimientos y esperar al momento adecuado.
El pívot
Hay rotaciones pre establecidas para que los movimientos sean coordinados en edades tempranas. Así por ejemplo una de las primeras rotaciones que se aprenden, es la llamada rotación de pívot.
Consiste en que el pívot que parte desde la zona central, cae a la banda del balón para bajar al apoyo en caso que el balón pase a la banda contraria. En el siguiente gráfico lo vemos perfectamente: